Hoy, en el patio, durante el recreo, hemos rescatado un pichón que estaba aprendiendo a volar. Era un buen sitio para aprender, indudablemente: estaba en un colegio. Pero no era un buen momento, porque el alumnado estaba jugando y podría haberlo lastimado sin querer. Así que lo recogimos y lo guardamos en una caja con cuidado hasta que se acabara la jornada escolar, para liberarlo entonces.
Ésta fue nuestra pequeña aventura de hoy, contada por un ser de la especie humana. No sabemos cómo la contaría el pichón, si tuviera que ofrecer su visión de lo que le ha sucedido. -Si a alguien se le ocurre...-
Hablando de aves y esas cosas... os invito a que conozcáis a Piper:
Y a una cigüeña:
Son dos cortos que no han dejado indiferentes a quienes los han visto. Seguro que a vosotr@s tampoco.
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